Feliz viernes,
1.
Si tu forma de dirigir es verificar cada movimiento de tus colaboradores pasarás todo el tiempo detrás de ellos, sin tiempo para nada más, y podrás dirigir a pocas personas.
Deja hacer. Explica el resultado que esperas conseguir, pacta un plazo factible y confía.
2.
Es un error suponer que existe una única forma de hacer las cosas.
Hay que ser claro. Es mejor explicar que prefieres el tren al avión y que te gusta ir a pie del hotel a las reuniones, que no decir un escueto “quiero un viaje de negocios ben organizado”.
Es mejor admitir tu debilidad por los cristales limpios y que no te gusta oler a lejía, que no pedir una vaga “limpieza de oficina bien hecha”.
+1
El arte de dirigir consiste en saber cuando abandonar la batuta para no molestar a la orquesta.
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